En el centro de un parque romantico, esta obra capital de la arquitectura del siglo XVI ha conservado a lo largo del tiempo el refinamiento, la elegancia y la gracia de un castillo de excepción del Renacimiento.
Accedemos a la cámara que fué ocupada por Louis XIII en 1619 cuando rindió visita al señor de Azay por la anticámara que data del siglo XVII y presenta retratos de los reyes de Francia desde el renacimiento a este periodo.
La Gran Sala acogía bailes y festines. La imponente chimenea decorada con columnas y pilastres, así como el friso de follaje pintado bajo la cornisa, pertenece a la decoración original.
La primera cámara del apartamento del señor y de la dama de Azay está decorada con tapicerias que proceden de una misma tintura e ilustran la historia de Psiqué y el Amor, y está tejido hacia 1560.
La cámara alta se abre hacia tres lados: el patio, el jardín y el patio interior.
El comedor conserva el sercicio de mesa con las armas de los Biencourt.
Y el Salon biencourt que ha reencontrado la atmosfera calurosa que poseía en el siglo XIX gacias a una coleción de pinturas, de retratos históricos y de fotografías de marqueses y sus esposas.
Habiendo terminado nuestra visita, nos recreamos en los jardines y el estanque que rodea al castillo por su parte trasera.
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